Toca artículo lleno de divagaciones sobre el futuro del asistente de Google y el paso obvio hacia el uso de Bard (o una variante más eficiente energéticamente hablando). Sinceramente, me lo creeré cuando lo vea.
Me imagino que Google optará por una distribución muy lenta, quizás solo disponible para nuevo hardware y exclusivamente en inglés durante bastante tiempo. Una vez los costes del uso de la IA estén más normalizados, nos llegará a todo el mundo.
Ojalá me equivoque porque es justo en los asistentes donde este tipo de IA conversacionales tienen más sentido (y, a la vez, son más peligrosas).