Las navidades no son lo mismo cuando uno se hace mayor: no se trata de que descubramos a los hacedores de regalos o que dejemos de creer en hijos de palomas, sino que lo que antes eran casi tres semanas de vacaciones ahora son un par de días llenos de estrés y ansiedad.
A pesar de todo, quería desearos unas felices fiestas y todo eso.