Primero fueron a por el texo, luego a por las imágenes y vídeos; ahora su nuevo objetivo es la música. La Inteligencia Artificial lo quiere abarcar todo y si nos centramos en su estado actual, diría que los músicos no deberían tener mucho miedo. Pero eso es lo mismo que podían decir hace una década los guionistas y hace un par de años los ilustradores, así que es cuestión de tiempo que las IA mejoren (de hecho, Google y Meta parecen ofrecer ya mejores resultados).
Para muestra de lo que digo, un poco de “música ambiente con xilófono y clavicembalo, toque juvenil pero no infantil”. El prompt que utilicé en Stable Audio para hacer esta pieza tan olvidable: