Recuerdo lo divertido que era imprimir algo en la facultad llevando un USB: no sólo te cobraban un extra por la sola inserción de la memoria en sus ordenadores sino que te la llenaban de curiosos virus.
Eran otros tiempos, dominados por sistemas que no sabían protegerse contra los autoejecutables y permitían una mayor propagación de esta clase de amenazas.
Sin embargo hoy en día seguimos sin estar totalmente a salvo y aquí nos detallan unos cuantos de los mayores peligros con los que puedes encontrarte.