Sabía perfectamente que estas cosas se podían hacer, pero daba por hecho que estaría tajantemente prohibido en todas las redes sociales y «solo» sería un negocio oscuro al que recurrirían algunas personas en casos extremos.
Viendo que TikTok no hace nada en contra de este popular usuario, el siguiente paso serán los imitadores y la pérdida de privacidad será cada vez más notoria.
Esto puede ser un baño de realidad para muchos que creían que solamente el Estado y sus Fuerzas de Seguridad serían las capaces de hacer esta clase de cosas.
Sobre este tema también he visto un artículo reciente bastante recomendable.