
La cronología es muy clara: Helvetica se creó 25 años antes que Aria. Sin embargo, eso tampoco implica que la primera sea totalmente original ni, por supuesto, que sea mejor. En el artículo original en inglés intetan destacar las novedades que introdujo Arial como los trazos finales rematados en ángulos rectos en lugar de terminaciones solamente horizontales o verticales.
Decidirse por una u otra es cuestión de gustos, pues ambas tienen solvencia contrastada en sus ámbitos. Pero yo sigo apostando por la tipografía que se creó para modernizar la identidad de Ubuntu.









