Una década después de que el creador matase su obra por ser demasiado adictiva, parece que una fundación creada por fans se ha hecho con la licencia del juego y está dispuesta a publicarlo muy pronto.
Una fundación compuesta por aficionados, verdad? no sé, cuando comprobemos la cantidad de publicidad o compras dentro de la aplicación que nos cuelan, entonces hablamos de si es afición o pura visión de negocio. Personalmente, si se confirman mis sospechas, cuentan con mi deseo de que se estampen contra una tubería verde, ya sea en forma de demanda de Nintendo por robarle contenido o porque el público en esta década ha cambiado.
Actualización:
Para sorpresa de nadie, la fundación de amiguísimos del Flappy Bird actúa en contra del deseo del creador del juego.
Y añado un vídeo de BaityBait sobre el tema: