
Sabes que algo va muy mal cuando una compañía que vive de la publicidad te vende que su Privacy Sandbox es la solución para que las promociones vuelvan a respetar la privacidad del usuario.
La parte negativa de que Privacy Sandbox haya sido un fiasco es que no podemos decir que la publicidad y seguimiento online, además del propio concepto de cookie, no necesiten ser enmendados de manera muy urgente por una entidad experta y concienciada pero ajena al negocio de la publicidad.
Sea como sea, se trata de un nuevo proyecto para el cementerio de Google y continúa la deriva de esta empresa hacia convertirse en una parodia de sí mismos.